Me han denunciado por amenazas y es mentira
En qué creía rousseau
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“El Estado de Chile no está cumpliendo, hasta el día de hoy, con sus deberes de darse los medios para investigar, juzgar y sancionar las violaciones a los derechos humanos. Por ello, la Dirección del INDH ha dicho que estamos más cerca de la impunidad que de la verdad y la justicia”, agregó.
En la misma línea, denunció que “hasta el día de hoy nadie ha comprobado que en Chile el Estado organizó y ejecutó un ataque masivo a la población civil, accediendo a la impunidad. No hay ningún informe internacional de derechos humanos que diga lo contrario, ni el INDH”.
3.- Hasta el día de hoy nadie ha comprobado que en Chile el Estado organizó y ejecutó un ataque masivo a la población civil, accediendo a la impunidad. No hay ningún informe internacional de derechos humanos que diga lo contrario, ni tampoco el INDH”.
También acusó que “el 3 de noviembre de 2019 me vi obligado a decir que no creía que hubiera violaciones sistemáticas, porque se me atribuyó falsamente haber dicho lo contrario y tal mentira se difundió en Chile y Europa.”
4.- Que el 3 de noviembre de 2019 fui obligado a decir que no creía que existieran violaciones sistemáticas, porque se me atribuyó falsamente haber dicho lo contrario y tal mentira se difundió en Chile y Europa.
Qué entendía Locke por derechos naturales
1) La primera sentencia del tribunal contra Hasel, de abril de 2014, le condenó a dos años de prisión por enaltecimiento del terrorismo, por unas canciones subidas a YouTube en las que decía cosas como las siguientes:
Los magistrados descartaron que estas manifestaciones estuvieran amparadas por el derecho a la libertad de expresión, ya que en ellas “late de forma patente el discurso del odio”. La sentencia fue suspendida por ser la primera.
3) En 2016 agredió a un periodista de TV3 en el despacho del rector de la Universidad de Lleida durante un encierro de protesta de profesores y estudiantes. Por esta agresión, en junio de 2020, fue condenado a seis meses de prisión y a una indemnización de 12.000 euros a la víctima. Esta sentencia aún no es firme.
4) Otro juzgado de Lérida, en 2017, le condenó por otra agresión, en este caso al testigo desfavorable de un juicio en el que fue absuelto un agente de la Guarda Urbana que había sido acusado de agredir a un amigo del rapero. Hasél fue condenado a dos años y medio de prisión y a pagar una multa de 2.400 euros.
Explique la distinción que hace Montesquieu entre democracia y libertad (o igualdad).
Filmación completa de Azcona activando Acto de Desobediencia en el Centro de Arte La Panera de la ciudad de Lleida el 22 de octubre de 2020. / Filmación completa de Azcona activando Acto de Desobediencia en el Centro de Arte La Panera de la ciudad de Lleida el 22 de octubre de 2020.
Filmación completa y en streaming de Azcona activando Acto de Desobediencia en el Teatro del Barrio de Madrid el 12 de noviembre de 2020. / Filmación completa y en streaming de Azcona activando Acto de Desobediencia en el Teatro del Barrio de Madrid el 12 de noviembre de 2020.
Filmación completa y en streaming de Azcona activando Acto de Desobediencia en el Centro de Arte Contemporáneo de Barcelona Fabra i Coats el 12 de diciembre de 2020. / Filmación completa y en streaming de Azcona activando Acto de Desobediencia en el Centro de Arte Contemporáneo de Barcelona Fabra i Coats el 12 de diciembre de 2020.
Sin duda Acto de Desobediencia fue la sesión más concurrida y aplaudida por un público dislocado, que escuchó la desgarradora autobiografía y los argumentos estéticos del artista Abel Azcona, acompañado por el actor y productor, Willy Toledo, afincado en Badalona desde hace meses. Azcona propone una aproximación a la insumisión civil y artística desde la memoria. Su polémico y atrevido discurso está recogido en su libro Acto de desobediencia (Editorial Milenio, 2020).Reportaje completo en PliegoSuelto.
Voluntad general de Rousseau
16Incluso en estas circunstancias, Magarinos Torres conservó una extraordinaria lealtad entre los residentes de Borel, y continuó buscando cargos políticos y asumiendo la defensa de otras comunidades de favelas. Pero el escenario estaba preparado para un enfrentamiento final en marzo de 1962, esta vez en la favela costera de Maré, y en circunstancias que implicaban un asesinato. Aquí, Magarinos Torres se enfrentaría a la letanía de males habitual, que ya era experto en enumerar: acaparamiento de tierras, pugnas populistas, represión política, violencia policial y matonismo local. Esta vez, sin embargo, hubo una vuelta de tuerca: una importante facción local volvió esas acusaciones contra Magarinos Torres, poniendo en tela de juicio todo lo que él y la UTF decían defender, y exponiendo como ningún otro caso las profundas contradicciones del activismo comunitario en un contexto de represión política continuada y vectores de poder en competencia.
17 Debo decir desde el principio que es prácticamente imposible esclarecer la verdad en este caso, ni a partir de los cientos de páginas de documentos policiales y artículos de prensa que generó, ni a partir de los recuerdos modernos de los residentes locales, que tienden a reproducir las fisuras anteriores.17 Surgen dos líneas argumentales distintas y artísticamente construidas, que implican visiones radicalmente diferentes de los derechos, las normas, la representación y el poder, por no mencionar versiones muy distintas de los hechos básicos del caso. Cualquiera de ellas podría ser una mentira; lo más probable es que ambas sean parcialmente falsas. Pero en sus redes de verdades y falsedades, ambos relatos arrojan luz sobre la sospecha, la corrupción y la inseguridad que rodeaban a las formas institucionales y populares de la práctica democrática en el Brasil de mediados del siglo XX.